Varias veces a la semana, en cuatro grandes ciudades del país, los voluntarios de Partilha Constante y Remar Portugal salen a las calles yendo a lugares donde hay una mayor concentración de personas con todo tipo de necesidades, incluyendo indigentes y drogadictos. Además de la comida caliente, le llevamos una palabra de aliento, invitándolos a abandonar las condiciones en que viven y entrar en nuestros centros de acogida.